
Президент Мексики enfrenta un gran reto que consiste en generar confianza tanto en inversionistas estadounidenses como mexicanos, asegurando que existen condiciones propicias para invertir en el país. En una conferencia, se destacó la importancia de transmitir la idea de que la ley protegerá a los inversionistas, se mejorará la seguridad y se impulsará la energía limpia.
Otro tema crucial que tanto la presidenta como el Secretario de Hacienda deberán abordar es la viabilidad de reducir el déficit fiscal a partir de 2025, con el objetivo de llegar al 3.5%, partiendo de niveles cercanos al 6% que se espera para este año. El camino para lograr esta meta se vuelve más complejo ante aspectos como la reforma judicial, que genera nerviosismo entre los inversores.
A pesar de los esfuerzos realizados por el Secretario de Hacienda en reuniones en Nueva York para calmar a los mercados, la incertidumbre persiste, especialmente en torno a la reforma judicial y su impacto en la economía. La falta de información oficial sobre las reuniones contribuye a alimentar las especulaciones sobre sus resultados.
El proceso de elección de jueces, magistrados y ministros, que inició recientemente con una polémica tómbola, ha aumentado el temor en el sector empresarial. Este contexto desfavorable se presenta justo antes de una cumbre de alto nivel entre líderes y empresarios de México y Estados Unidos, donde la reforma judicial estará en el centro de las discusiones.
A pesar de los intentos de la presidenta por transmitir confianza en el ambiente de negocios, desde el sector empresarial se considera que la incertidumbre jurídica ha llevado a que inversiones permanezcan detenidas. La necesidad de convencer a empresarios de ambos países de las condiciones favorables para invertir se convierte en un desafío importante en este contexto.
En medio de estas tensiones, poca credibilidad se deposita en la posibilidad de que se logre rápidamente un cambio positivo. Se espera que, en el mejor escenario, se presente un plan creíble a corto plazo para revertir la situación y recuperar la confianza de los inversionistas.